La motivación es el conjunto de factores conscientes o inconscientes que determinan un acto o una conducta. Dicho en otras palabras es todo lo que influye en una persona para formar sus actitudes y aptitudes.
Un profesional de la educación debe considerar a la motivación como uno de los principales elementos para crear aprendizajes significativos en sus alumnos. La motivación que aplique estará encaminada a mejorar la percepción que tienen los educandos de sí mismos para lograr sus metas; así como también en fomentar la búsqueda de estrategias y con éstas enfrentar los retos, superar y aprender de los errores, dejando de lado el conformismo.
Para lograr lo anterior, el profesor necesita analizar su conducta detectando los aciertos y los errores, de su manera de crear un entorno de aprendizaje. Esto lo llevará a cabo durante el desarrollo de las clases abordadas.
Para saber qué hago bien o mal como docente, requiero ver si estoy despertando el interés y la curiosidad de mis alumnos, manifestándoles lo significativo de lo que han de aprender.
Además debo desarrollar actividades que atraigan al alumno, porque si bien es cierto el ser humano se siente feliz cuando trabaja en aquello que le interesa y que ha elegido por sí mismo, no es algo impuesto. Algo que refleja claramente este tipo de actividades son los proyectos alternativos de trabajo, donde el alumno investiga sobre aquello que le llama la atención, expone su inquietud al profesor, y en un trabajo en conjunto se determina la viabilidad del proyecto, después este se pone en marcha, surgiendo nuevas interrogantes que el alumno podrá ir despejando.
La forma de organizar al grupo también influye determinantemente en la motivación, porque existen actividades que pueden ser causa de competencia, pero al abusar de ellas el alumno no busca aprender sino sobresalir, además siempre habrá perdedores los cuales se verán afectados; otras actividades se realizan de forma individual, éstas son buenas pero deben ser analizadas correctamente para su aplicación, por último existen las actividades de grupos cooperativos que ofrecen una amplia gama de beneficios siempre y cuando se consideren ciertas condicionantes como el tamaño del grupo, el objetivo a alcanzar, el tipo de tarea y por supuesto las características de los alumnos.
La interacción del profesor con los alumnos antes, durante y al final de una tarea es de vital importancia, porque cada uno de los mensajes que el docente emite son ejes articuladores del desempeño del alumno. Dichos mensajes, para que sean reguladores de una comunicación efectiva, necesitan estar encaminados a la superación de retos, dificultades, mejoramiento continuo, esfuerzo, pero sobre todo serán la guía del aprendizaje formando un ambiente de respeto y confianza entre todos lo miembros del grupo.
Dentro del aspecto motivacional del proceso de enseñanza-aprendizaje se encuentra un elemento fundamental que es la evaluación, la cual es un proceso continuo, sistemático, formativo que ayuda a la toma de decisiones. El alumno deberá estar consciente de la existencia de éste elemento, pero no como un método de represión, miedo o causante de frustración sino como el medio para verificar los logros, avances, y lo que se necesita cambiar para mejorar.
Un profesional de la educación debe considerar a la motivación como uno de los principales elementos para crear aprendizajes significativos en sus alumnos. La motivación que aplique estará encaminada a mejorar la percepción que tienen los educandos de sí mismos para lograr sus metas; así como también en fomentar la búsqueda de estrategias y con éstas enfrentar los retos, superar y aprender de los errores, dejando de lado el conformismo.
Para lograr lo anterior, el profesor necesita analizar su conducta detectando los aciertos y los errores, de su manera de crear un entorno de aprendizaje. Esto lo llevará a cabo durante el desarrollo de las clases abordadas.
Para saber qué hago bien o mal como docente, requiero ver si estoy despertando el interés y la curiosidad de mis alumnos, manifestándoles lo significativo de lo que han de aprender.
Además debo desarrollar actividades que atraigan al alumno, porque si bien es cierto el ser humano se siente feliz cuando trabaja en aquello que le interesa y que ha elegido por sí mismo, no es algo impuesto. Algo que refleja claramente este tipo de actividades son los proyectos alternativos de trabajo, donde el alumno investiga sobre aquello que le llama la atención, expone su inquietud al profesor, y en un trabajo en conjunto se determina la viabilidad del proyecto, después este se pone en marcha, surgiendo nuevas interrogantes que el alumno podrá ir despejando.
La forma de organizar al grupo también influye determinantemente en la motivación, porque existen actividades que pueden ser causa de competencia, pero al abusar de ellas el alumno no busca aprender sino sobresalir, además siempre habrá perdedores los cuales se verán afectados; otras actividades se realizan de forma individual, éstas son buenas pero deben ser analizadas correctamente para su aplicación, por último existen las actividades de grupos cooperativos que ofrecen una amplia gama de beneficios siempre y cuando se consideren ciertas condicionantes como el tamaño del grupo, el objetivo a alcanzar, el tipo de tarea y por supuesto las características de los alumnos.
La interacción del profesor con los alumnos antes, durante y al final de una tarea es de vital importancia, porque cada uno de los mensajes que el docente emite son ejes articuladores del desempeño del alumno. Dichos mensajes, para que sean reguladores de una comunicación efectiva, necesitan estar encaminados a la superación de retos, dificultades, mejoramiento continuo, esfuerzo, pero sobre todo serán la guía del aprendizaje formando un ambiente de respeto y confianza entre todos lo miembros del grupo.
Dentro del aspecto motivacional del proceso de enseñanza-aprendizaje se encuentra un elemento fundamental que es la evaluación, la cual es un proceso continuo, sistemático, formativo que ayuda a la toma de decisiones. El alumno deberá estar consciente de la existencia de éste elemento, pero no como un método de represión, miedo o causante de frustración sino como el medio para verificar los logros, avances, y lo que se necesita cambiar para mejorar.
Lectura: “Condicionantes Contextuales de la Motivación por Aprender”
Autor: Jesús Alonso Tapia
Libro: La Motivación en el aula p.p: 31-50
1 comentario:
no habia visto el blog de un maestro(a)... muy bueno...
seguire leyendo..
saludos..
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